Título del Capítulo: «La irrupción de las redes de mensajería en la práctica del fact-checking»
Autoría: Emma Torres-Romay; Silvia García-Mirón
Cómo citar este Capítulo: Torres-Romay, E.; García-Mirón, S. (2023): «La irrupción de las redes de mensajería en la práctica del fact-checking». En Míguez-González, M.I.; Dafonte-Gómez, A. (coords.), Narrativas digitales contra la desinformación. Verificación de datos y alfabetización en la sociedad de la información. Salamanca: Comunicación Social Ediciones y Publicaciones.
ISBN: 978-84-17600-85-3
d.o.i.: https://doi.org/10.52495/c8.emcs.19.p105
8. La irrupción de las redes de mensajería en la práctica del fact-checking
Emma Torres-Romay
Universidade de Vigo
Silvia García-Mirón
Universidade de Vigo
Introducción
Según los últimos datos «el volumen de trabajos sobre desinformación en España ha aumentado progresivamente desde 2016 hasta alcanzar la cifra de 66 estudios publicados en 2020. El mayor crecimiento se produjo en 2019» (García-Marín; Salvat, 2021: 205). La considerable atención al fenómeno que otorga el ámbito académico refleja la preocupación social sobre éste, existiendo una clara conciencia de la influencia que las noticias faltas (fake news) pueden tener en la opinión pública (Rodríguez-Fernández, 2019: 1718). En este contexto, la importancia de los verificadores de noticias (fact-checkers) guarda relación con la necesidad de los ciudadanos de protegerse frente a las fake news, pero también con una práctica periodística que garantice la fiabilidad de las informaciones y, por tanto, la función de los medios y, en tercer lugar, con «realizar un escrutinio al poder» (Rodríguez, 2020: 243).
Precisamente, en lo relativo a los fact-checkers, el grupo de investigación SEPCOM de la Universidade de Vigo desarrolla un proyecto centrado en estudiar las redes, temas y formatos de los fact-checkers iberoamericanos. Los avances del proyecto han dado lugar a trabajos de gran interés, siendo especialmente importantes las aportaciones que analizan el uso de los verificadores en redes sociales: Facebook (Abuín-Penas; Míguez-González; Dafonte-Gómez, 2023), Youtube (Abuín-Penas; Fontenla-Pedreira, 2022), Twitter (Míguez-González; Martínez-Rolán; García-Mirón, 2023) e Instagram (Abuín-Penas; Pérez-Seoane; Corbacho-Valencia, 2023). Sin embargo, en este seguimiento es necesario dar un paso más hacia los sistemas de mensajería, clasificados a efectos de planificación y medición como redes sociales (IAB Spain, 2023) pero con, obviamente, diferencias sustanciales.
En el proyecto indicado se cuenta con un trabajo inicial de referencia relativo a Telegram y acotado en un fact-checker concreto: Maldito Bulo (Dafonte; Baamonde, 2020), como miembro de la IFCN (Red Internacional de Verificacion de Datos), entidad que aglutina a todos los fact-checkers del mundo. En este trabajo se considera necesario realizar un acercamiento general al papel que pueden desempeñar los servicios de mensajería en el ecosistema de los servicios de verificación. Para ello se ha diseñado una investigación específica inicial que pondrá sobre la mesa puntos de partida relativos a la capacidad de alcance de estos sistemas frente a las redes sociales o incluso las peculiaridades que plantean en su relación con los usuarios además de determinar aspecto básicos en cuanto a la frecuencia de publicación.
Esta propuesta parte, por tanto, de identificar el papel de las redes de mensajería en la práctica de fact-checking, buscando entender cómo se posiciona este recurso en la oferta existente de servicios contra la desinformación. Siendo este el objetivo prioritario, se añaden una serie de objetivos secundarios en torno a la identificación de esos servicios y a la gestión que los verificadores acreditados están realizando de éste. También es necesario valorar cómo evolucionan los verificadores en esos servicios de mensajería en relación con otras redes sociales.
Para poder hacer frente a esta propuesta se establecen dos fases de investigación: una primera relativa al análisis del estado de la cuestión, en la que se desarrolla una revisión bibliográfica sobre el tema, y una segunda destinada a realizar un estudio de campo sobre fact-checkers iberoamericanos, intentado identificar sus dinámicas de funcionamiento en un tipo de redes sociales muy concretas: los servicios de mensajería.
Para lograr los objetivos marcados, y atendiendo a la metodología descrita, se acota el objeto de estudio en las dos principales redes de mensajería a nivel mundial (Whatsapp y Telegram) siendo estos, además, los sistemas de mensajería más empleados para acceder a noticias (22% en el caso de Whatsapp y 6% en Telegram) (Hootsuite, 2022). Para poder realizar el análisis se tienen en cuenta tan sólo los fact-checkers que están adecuadamente acreditados por la IFCN.
En la presente investigación resulta necesario recopilar los estudios previos que pueden haberse publicado en torno al objeto de estudio. Partiendo de un primer análisis de las investigaciones existentes sobre los servicios de mensajería que centran la atención del estudio se encuentra una amplia variedad de trabajos que vinculan Whatsapp con la educación (Rubio; Perlado, 2015), algo que también se utiliza en el caso de Telegram (Martínez; Dafonte; García, 2017) aunque en este último existe una especial atención a las posibilidades de esta herramienta en la actividad periodística (Sánchez; Martos, 2020). Si se combinan ambas redes, la situación es similar (Sedano; Palomo, 2018), con mayor presencia de temas educativos que de cualquier otro ámbito.
Desde una perspectiva más concreta y directamente relacionada con el objeto de estudio, se parte de la consideración de que, como se ha indicado, el fenómeno del fact-checking está ampliamente estudiado en la academia (Dafonte-Gómez; Corbacho-Valencia; García-Mirón, 2021). Dichos estudios se aplicaron a acotaciones geográficas limitadas (López-Pan; Rodríguez-Rodríguez, 2020) y a plataformas específicas como Newtral o Maldita (García; López, 2021) con una especial profusión de trabajos relacionados con la pandemia y el covid, empleando conceptos como «infodemia» (Aguado; Bernaola, 2020), desinformación (Sued, 2020; Alonso, 2021) y bulos (Salaverría et al., 2020).
Pero además de lo anterior, se establece una búsqueda en torno a investigaciones que hayan analizado directamente los servicios de mensajería para el fact-checking. Como se ha señalado, los trabajos fundamentales en torno a este tema han sido aportados por el grupo de investigación de la Universidade de Vigo (Dafonte; Corbacho-Valencia, 2020) y se confirma la presencia prioritaria de Telegram (Díez-Garrido; Renedo; Cano-Orón, 2021) frente a Whatsapp (Palomo; Sedano, 2018). Este hecho puede deberse a las diferencias técnicas entre los dos sistemas, ya que en el caso de Telegram se trata de un servicio de suscripción en el que pueden archivarse los contenidos para su posterior análisis y estudio, mientras que en el caso de Whatsapp se establece un sistema de consulta por parte de los usuarios, de carácter personal e individualizado que no puede ser archivado ni consultado de forma externa: «Nuestros equipos de fact-checking en Brasil, México, Estados Unidos (en español), India, Alemania y Francia operan tiplines de WhatsApp a través de las cuales el público puede proponer temas para que sean investigados» (AFP Checamos, AFP Factual).
Dando un paso más en el proceso de investigación, se analizan los verificadores miembros de la IFCN que cuenta con servicio en alguna de estas redes. Para poder identificarlos se toma como referencia la lista que ofrece Whatsapp con los contactos existentes. Filtrando los fact-checkers por países para recoger los iberoamericanos se obtiene una muestra de 12 cuentas en Whatsapp, de las cuales 5 también disponen de servicio en Telegram. En este punto se aplica un factor de corrección en el listado al identificar el servicio Fast Check CL de Chile, que cuenta con cuenta en Telegram y no en Whatsapp, siendo el único caso localizado con esta formulación.
A partir de esta muestra se aplica un análisis pormenorizado que se recoge en la Tabla 1. En el mismo se identifica qué tipo de cuenta tiene el verificador en Whatsapp, diferenciando entre cuentas de empresa (C.E.) y cuentas estándar o personales (C.S.). Mientras que las primeras implican una relación impersonal con el verificador en las segundas se aborda una relación personal donde, de hecho, se incluyen mensajes-tipo para saludar al supuesto interlocutor del diálogo («Oi Fatima» – Aos Fatos). En el caso de Telegram se cuenta con datos de suscriptores del servicio. A partir de esas dos columnas, se consigna la información relativa al resto de redes sociales en las que el verificador dispone de cuenta.
Tabla 1. Verificadores del IFCN con servicios en Whatsapp y Telegram*
Servicios de Mensajería |
Redes sociales |
||||||||
Verificador |
País |
|
Telegram (Suscriptores) |
(Me gusta) |
(Seguidores) |
(Followers) |
Youtube (suscriptores) |
TikTok (seguidores) |
Otros |
AFP Checamos |
Brasil** |
√ C.E |
--- |
√ 1.089 |
√ 890 |
√ 25.500 |
--- |
-- |
-- |
AFP Factual |
Uruguay** |
√ C.E |
--- |
√ 8.439 |
√ 17.400 |
√ 68.800 |
--- |
-- |
-- |
Agência Lupa |
Brasil |
√ C.E |
--- |
√ 192.610 |
√ 479.000 |
√ 221.700 |
√ 4.770 |
√ TikTok |
|
Aos Fatos |
Brasil |
√ C.S |
√ 15.681 |
√ 82.155 |
√ 328.000 |
√ 296.600 |
√ 3.770 |
√ 43.800 |
--- |
Chequeado |
Argentina |
√ C.E |
--- |
√ 94.916 |
√ 77.600 |
√ 317.700 |
√ 2.970 |
√ 23.000 |
√ Spotify |
Colombia Check |
Colombia |
√ C.S |
√ 628 |
√ 23.877 |
√ 20.300 |
√ 89 |
√ 970 |
√ 23.400 |
--- |
Ecuador Chequea |
Ecuador |
C.S.*** |
--- |
√ 14.000 |
√ 4.336 |
√ 23.100 |
√ 1.350 |
-- |
-- |
EFE Verifica |
España |
C.E. |
--- |
√ 523 |
√ 144 |
√ 22.100 |
--- |
√ 1.133 |
--- |
Fast Check CL |
Chile |
-- |
8 |
√ 10.008 |
√ 249.000 |
√ 58.500 |
√ 137 |
-- |
-- |
Maldito Bulo |
España |
C.E. |
√ 17.121 |
√ 117.027 |
√ 66.000 |
√ 298.400 |
√ 3.800 |
√ 24.300 |
|
Newtral |
España |
C.E. |
9.217 |
√ 40.492 |
√ 45.100 |
√ 201.000 |
√ 20.200 |
-- |
--- |
Polígrafo |
Portugal |
C.E. |
0 |
√ 127.486 |
√ 42.800 |
√ 46.400 |
-- |
-- |
-- |
Verificador de La República |
Perú |
C.E. |
--- |
√ 2.432 |
--- |
--- |
-- |
-- |
-- |
*Datos del 1 de marzo de 2023. ** La misma cuenta en dos idiomas distintos (portugués y español) *** La cuenta aporta error en el número consignado.
Fuente: Elaboración propia (2023).
Por otra parte, siendo Telegram el servicio de mensajería con un uso más estratégico y proactivo por parte del verificador, se ha tratado de determinar una tendencia en la frecuencia de publicación. Para ello se indica la media del número de publicaciones por semana durante el periodo del 30 de enero de 2023 al 5 de marzo de 2023, 5 semanas en total, y, por la otra, el total de publicaciones/mes en febrero de 2023 (del 1 al 28 de febrero) con la finalidad de realizar una comparativa entre aquellos fact-checkers iberoamericanos con presencia en Telegram.
Tabla 2. Comportamiento en Telegram de los verificadores iberoamericanos.
Verificador |
Telegram (Suscritores) |
Frecuencia Publicación/mes |
Frecuencia publicación/semana |
Aos Fatos |
√ 15.681 |
58 |
14,2 |
Colombia Check |
√ 628 |
4 |
1 |
Fast Check CL |
8 |
- |
- |
Maldito Bulo (Maldita.es) |
√ 17.121 |
32 |
8 |
Newtral |
9.217 |
28 |
7 |
Polígrafo |
0 |
0 |
0 |
Fuente: Elaboración propia (2023).
Tras la investigación realizada se advierte, en primer lugar, que los servicios de mensajería resultan un medio de verificación y difusión minoritario para los fact-checkers iberoamericanos en el contexto actual. Así, el uso de los servicios de mensajería para propuestas de fact-checking sigue siendo residual y, de hecho, se trata de servicios con menos suscriptores (Telegram) o usuarios (Whatsapp) que las redes sociales convencionales. Frente al uso de redes sociales como Facebook, Instagram o Twitter, que ofrecen información periódica atendiendo a dar respuesta a los principales bulos del día a día, un servicio como Whatsapp requiere de un tipo de ciudadano proactivo que debe solicitar directamente la verificación de una información o noticia concreta. Por tanto, puede concluirse que el uso de los servicios de mensajería todavía resulta anecdótico por parte de los fact-checkers iberoamericanos para la verificación de noticias, especialmente en términos comparativos con el uso que se está haciendo de redes sociales como Twitter, Facebook o Instagram.
En segundo lugar, la presente investigación ha permitido confirmar que los fact-checkers iberoamericanos parecen no tener una apuesta clara por el uso de los servicios de mensajería con propuestas desiguales con respecto a ambas. Así, las posibilidades técnicas de Telegram, como un requisito de suscripción, difieren mucho de la utilización que puede realizarse de Whatsapp, centrado en la consulta proactiva por parte del usuario. Sólo seis verificadores disponen de cuenta en Telegram, y dos de ellas no tienen suscriptores (Polígrafo) o un número no relevante (Fast Check CL, Chile con sólo 8 suscriptores). Las cuentas con mayor presencia y actividad son las de Maldito Bulo y Newtral (España) y Aos Fatos (Brasil). En el caso de Whatsapp, prácticamente todas disponen de este servicio de verificación, a excepción de Fast Check (Chile), sin embargo, como se ha mencionado previamente, no supone un trabajo proactivo por parte del verificador, sino una solicitud y un contacto directo por parte del solicitante de información. De los trece verificadores iberoamericanos analizados, nueve se corresponden con cuentas de empresa. No obstante, sólo seis de ellas están enlazadas desde la página web del fact-checker, por lo que se advierte una falta de difusión de este servicio.
El presente estudio supone, por tanto, una investigación de carácter exploratorio sobre la que plantear la continuidad en las líneas de investigación que relacionan a los fact-checkers y las redes de mensajería, especialmente atendiendo a una investigación ya de carácter cualitativo con una metodología basada en el análisis de contenido. Se abre, así, la posibilidad de nuevas propuestas de investigación que aborden la evolución de los fact-checkers en el uso de Whatsapp y Telegram.
Este capítulo forma parte del proyecto «Narrativas digitales contra la desinformación. Estudio de redes, temas y formatos en los fact-checkers iberoamericanos», financiado por la Agencia Estatal de Investigación, de España (Ref. PID2019-108035RB-I00/AEI/ 10.13039/501100011033).
Abuín-Penas, J.; Pérez-Seoane, J.; Corbacho-Valencia, J.M. (2023): «Análisis de los contenidos verificados por los fact-checkers españoles en Instagram», Revista De Comunicación, vol. 22. https://doi.org/10.26441/RC22.1-2023-3089
Abuín-Penas, J.; Míguez-González, M.I.; Dafonte-Gómez, A. (2023): «Verificación sobre la COVID-19 en Facebook. Análisis temático de las publicaciones realizadas por los fact-checkers iberoamericanos», Textual & Visual Media, revista de la Sociedad Española de Periodística, vol. 16. https://doi.org/10.56418/txt.16.2022.001
Afp checamos. https://checamos.afp.com/como-trabalhamos
Alonso González, M. (2021): «Desinformación y coronavirus: el origen de las fake news en tiempos de pandemia», Revista de Ciencias de la Comunicación e Información, vol. 26, núm. 1. https://doi.org/10.35742/rcci.2021.26.e139
Dafonte Gómez, A.; Baamonde Silva, X. (2020): «Maldito bulo: análisis de actividad e impacto en Telegram». En A.M. De Vicente Domínguez, y J. Sierra Sánchez (coord.): Aproximación periodística y educomunicativa al fenómeno de las redes sociales. McGraw-Hill, pp. 1019-1037.
Dafonte Gómez, A.; Corbacho-Valencia, J.M. (2020): «Fact-checking en Telegram: estudio comparativo entre Newtral y Maldito Bulo», Comunicación y Diversidad. Libro de comunicaciones del VII Congreso Internacional de la Asociación Española de Investigación de la Comunicación, pp. 1216-1228.
García Vivero, G.; López, X. (2021): «La verificación de datos en Europa. Análisis de 5 iniciativas europeas: Maldita.es, Newtral, Pagella Politica, Les Décodeurs y BBC Reality Check», AdComunica, pp. 235-264. https://doi.org/10.6035/2174-0992.2021.21.12
Hootsuite; We are Social (2022): Informe Global digital, 2022 en https://blog.hootsuite.com/es/informe-digital-estadisticas-de-redes-sociales/
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