MAPCOM
Quince años de investigación sobre Comunicación en universidades españolas.
Fifteen years of research into Communication in Spanish universities (2023)
Título del Capítulo:
«Conclusiones. El futuro de MapCom: observatorio de la metainvestigación en comunicación»
Autoría: Carmen Caffarel-Serra; Carlos Lozano-Ascencio; Juan Antonio Gaitán Moya; José Luis Piñuel-Raigada
Cómo citar este Capítulo: Caffarel-Serra, C.; Lozano-Ascencio, C.; Gaitán Moya, J.A.; Piñuel-Raigada, J.L. (2023): «Conclusiones. El futuro de MapCom: observatorio de la metainvestigación en comunicación». En Caffarel, C.; Lozano, C.; Gaitán, J.A.; Piñuel, J.L. (eds.), MAPCOM. Quince años de investigación sobre Comunicación en universidades españolas. Fifteen years of research into Communication in Spanish universities. Salamanca: Comunicación Social Ediciones y Publicaciones.
ISBN:978-84-17600-82-2
d.o.i.: https://doi.org/10.52495/conclu.emcs.20.mic8
Conclusiones. El futuro de MapCom: observatorio de la metainvestigación en comunicación
Carmen Caffarel-Serra
Universidad Rey Juan Carlos
Carlos Lozano-Ascencio
Universidad Rey Juan Carlos
Juan Antonio Gaitán Moya
Universidad Complutense de Madrid
José Luis Piñuel-Raigada
Universidad Complutense de Madrid
Después de medio siglo de institucionalización de los estudios universitarios de Comunicación en España, el Observatorio de la metainvestigación en comunicación del programa MapCom ha aportado una visión histórica de su desarrollo científico. Esta visión ha permitido evaluar las vulnerabilidades y examinar el progreso de la actividad investigadora y de las publicaciones científicas, así como dar a conocer el discurso de los investigadores expresado mediante técnicas cualitativas (Delphi, Phillips 66) y cuantitativas (encuesta y análisis de páginas web de grupos de investigación). A esta visión histórica se añade la aportación de bases de datos de acceso abierto y la cartografía interactiva de mapas colaborativos sobre la producción y la actividad científica.
Con relación a las producciones científicas (primera parte) la atención de la metainvestigación se ha centrado en tesis doctorales, comunicaciones a congresos, artículos publicados en revistas indexadas, libros y proyectos I+D.
Si valoramos las producciones científicas en su conjunto merece la pena destacar:
- Existe poca relación entre los proyectos financiados y las tesis doctorales, lo que precariza la formación de investigadores.
- En toda la producción científica escasea la experimentación de nuevos métodos susceptibles de facilitar la intervención sobre prácticas comunicativas.
- La participación en los congresos de Comunicación en España apunta más a la obtención de valoraciones favorables por parte de las Agencias de evaluación que a la aportación de innovaciones a la actividad investigadora y a la función social de la investigación.
- Se ha confirmado que, en las revistas indexadas, los artículos publicados que proceden de proyectos de investigación en convocatorias competitivas consiguen mayores impactos. De hecho, hoy, las revistas tienden a privilegiar la aceptación de artículos procedentes de proyectos I+D.
- El libro, por su perdurabilidad, sigue siendo un recurso ineludible en las investigaciones y entre los investigadores del área, por ello, hay que reivindicar su presencia en los indicadores de evaluación de la investigación y su consideración como medio privilegiado para difundir el conocimiento científico.
- La convergencia de resultados de todos los documentos analizados de la producción científica ha sido relevante en lo que atañe a los marcos de la actividad investigadora, con escasa financiación y más dependiente de la financiación pública que de la privada; también en lo que atañe a objetivos de investigación al primar la descripción y la explicación antes que la evaluación y la intervención; y finalmente, siguen siendo hegemónicos la comunicación mediática, antes que la organizacional como objetos de estudio, y el análisis de contenido y de discurso antes que las encuestas y la experimentación, como métodos de investigación.
En la segunda parte, hemos estudiado las voces de los investigadores que representan muestralmente a una población académica, a través de encuestas; las voces de los investigadores que representan estructuralmente las tareas comprendidas en la actividad investigadora, a través de Phillips 66; y, en tercer lugar, las voces del discurso cualificado de investigadores expertos sobre condiciones, procesos y prospectivas de la actividad investigadora, mediante la técnica Delphi. A esta segunda parte se añade la reflexión de las voces de los grupos consolidados de investigación reconocidos por la comunidad universitaria estudiada, sobre su estatuto y futuro mediante la convocatoria de simposios y el análisis de sus páginas web.
Si valoramos las voces de los investigadores en su conjunto merece la pena destacar:
- La evaluación de la calidad investigadora es valorada no tanto por la excelencia de sus resultados, el avance de conocimiento, y los retornos sociales, sino por el impacto de las publicaciones conforme al número de citas. La percepción entre los investigadores es que los rendimientos más valorados de la experiencia investigadora son las acreditaciones académicas, seguidas de la movilidad académica, lo cual confirma igualmente la competencia corporativa.
- La burocratización para la realización de la actividad investigadora es excesiva y repercute en perjuicio de los propios investigadores más que en la facilitación de su actividad científica; las instituciones priman más el control a los investigadores que la ayuda a la investigación. El control viene a ser un producto más de la sospecha que del servicio.
- Los investigadores reclaman que sean ellos mismos los que puedan decidir sobre el tiempo dedicado a la docencia y a la investigación.
- Infravaloración en las asignaciones presupuestarias en el ámbito de la Comunicación con respecto al resto de las Ciencias Sociales y frente a la relevancia social de la Comunicación en la sociedad actual.
- Se reclama el reconocimiento (estatus) por parte del sistema universitario español, del valor prioritario de los Grupos de investigación como agentes protagonistas para formar parte institucional de las políticas académicas de investigación. Los grupos deberían desempañar funciones esenciales en la investigación: formación de investigadores, solicitud y desarrollo de proyectos competitivos y, por ello, se reclama mayor financiación.
- De cumplirse lo anterior, sería viable la puesta en marcha de redes de grupos de investigación reclamada por los investigadores, para incentivar la interdisciplinariedad y la puesta en común de proyectos de diferentes escalas autonómicas, estatales e internacionales.
De la tercera parte del libro, dedicada a los mapas interactivos de la metainvestigación en Comunicación, se concluye:
- La política datos abiertos y de mapas interactivos multiplica exponencialmente los procesos de investigación en comunicación de la comunidad científica. Esto es así porque las bases de datos y los mapas interactivos siempre permiten métricas productivas, tanto para avanzar en el conocimiento y su representación científica, como para plantearse nuevas hipótesis y su representación posterior, gráfica y matemática, convirtiéndose en referencia como fuentes científicas de metainvestigación.
- La transparencia y rendimiento de cuentas, así como el retorno social de la investigación pueden ser confirmados gracias al mantenimiento y revisión permanente de mapas interactivos muy útiles tanto para el diseño de políticas académicas de investigación como para la evaluación científica de proyectos solicitados y las asignaciones presupuestarias a dichos proyectos, en ayuda de una mayor integración y equidad territorial.
- No sólo el acceso abierto a las bases de datos es imprescindible para cualquier diseño futuro de investigación, sino que es especialmente relevante para la práctica de la metainvestigación y la función social de su reflejo histórico.
El programa MapCom puede servir como referente para el futuro de la metainvestigación en este campo ya que integra tanto el análisis de la producción científica realizada en límites temporales, como la auscultación de las voces de los investigadores al expresarse sobre su actividad como población (comunidad científica), agentes (de roles específicos del proceso investigador) y especialistas (expertos) para anticipar el futuro de la investigación.
Finalmente, el programa MapCom debería constituirse como una instancia permanente, ya sea como Observatorio o como Instituto de la Metainvestigación en Comunicación. Este programa se perfila como un modelo paradigmático susceptible de ser replicado en otros ámbitos de las ciencias sociales, de la naturaleza y de la cultura.
Madrid, marzo de 2023