Título del Capítulo: «Prólogo»
Autoría: Juan Antonio García Galindo
Cómo citar este Capítulo: García Galindo, J.A. (2025): «Prólogo». En Ruiz Muñoz, M.J.; Ruiz del Olmo, F.J.; Simelio Solà, N. (eds.), Andalucía y Cataluña.Cultura e interacción en las representaciones audiovisuales contemporáneas. Salamanca: Comunicación Social Ediciones y Publicaciones.
ISBN: 978-84-17600-17-4
d.o.i.: https://doi.org/10.52495/prol.emcs.32.c47
Prólogo
Cuando observamos el mapa de la península Ibérica podemos distinguir, junto al vecino Portugal, un extenso territorio caracterizado por su gran diversidad geográfica, lingüística y cultural que llamamos España, una vasta geografía política que la Historia con mayúsculas ha ido forjando no sin conflictos a lo largo del tiempo, y que se ha consolidado como resultado de las aportaciones de unos y de otros pueblos hasta ser lo que es hoy, un país y un Estado que posee una riqueza natural, social y cultural extraordinaria. En ese mapa, situadas en dos de las esquinas de esa piel de toro, y separadas por cerca de 1.000 kilómetros de distancia que el desarrollo de las comunicaciones ha ido recortando, se encuentran Cataluña y Andalucía. Andalucía y Cataluña.
Esa distancia nunca ha sido un obstáculo para que se haya producido históricamente el encuentro de dos culturas aparentemente diferentes, que atesoran más rasgos comunes que divergentes, y que han sabido encontrarse en numerosas ocasiones a lo largo del tiempo. Así lo han entendido los responsables y autores de la presente obra, Andalucía y Cataluña. Cultura e interacción en las representaciones audiovisuales contemporáneas, que, con edición de los profesores María Jesús Ruiz Muñoz y Francisco Javier Ruiz del Olmo, de la Universidad de Málaga, y de Núria Simelio Solà, de la Universidad Autónoma de Barcelona, ahora publica Comunicación Social Ediciones. En este trabajo, un selecto grupo de investigadores reflexiona sobre la cultura audiovisual que se forja entre estos dos pueblos de España.
La primera pregunta que se le revela al lector al aproximarse a esta obra es: ¿por qué escribir sobre Andalucía y Cataluña? Dos comunidades autónomas españolas separadas por cientos de kilómetros de distancia y con aparentes diferencias entre ellas. Sin embargo, esta oportuna pregunta encuentra también las respuestas que desvelan la justificación y la necesidad de este tipo de estudios. Se trata, en primer lugar, de dos comunidades españolas cuyo estudio comparado contribuye a conocer mejor el conjunto de España y el papel de cada una de ellas dentro de la dinámica cultural del Estado. En segundo lugar, huelga decir que no existen para la investigación científica barreras geográficas ni temáticas, y que las relaciones entre los académicos de las universidades catalanas y andaluzas han sido siempre frecuentes. En tercer lugar, y en consonancia con esto último, las relaciones entre la cultura catalana y la cultura andaluza han sido mucho más frecuentes de lo que por lo general suele suponerse, atraídas quizás por la fuerza que emana de ambas. Y, en cuarto lugar, el desarrollo de los transportes y de las comunicaciones ha facilitado el acercamiento entre ellas, multiplicado por el auge de las tecnologías digitales. Pero junto a estas respuestas sobresale una por su especial carácter: el gran nexo entre Andalucía y Cataluña es nuestra mediterraneidad común. Sin duda, el mar que compartimos, y que nos une, ha sido históricamente la base sobre la que se asientan nuestros rasgos más definitorios.
Por otro lado, desde la perspectiva de la comunicación, el predominio en la actualidad de los formatos audiovisuales ha generado narrativas de gran influencia en la construcción de las representaciones culturales dominantes, que afectan por igual a una y otra región, y que son incluso recíprocas. De ahí que, más allá de los estereotipos, conocer los flujos e interacciones que se producen en el marco de la cultura audiovisual entre la producción andaluza y la catalana sea, pues, objetivo del presente libro.
Es esta una ocasión feliz porque se publica una obra que aborda una línea de investigación que explora, a través de la producción audiovisual, el intercambio comunicativo y simbólico que se produce entre dos comunidades de fuerte idiosincrasia cultural. En un momento de emergencia de nuestro Instituto Andaluz de Investigación en Comunicación y Cultura, este libro es una contribución muy pertinente al estudio del territorio en el que se enmarca nuestra actividad, un testimonio de primera magnitud, y una excelente oportunidad para afrontar uno de sus grandes desafíos científicos, no sólo por hacer avanzar el conocimiento de la realidad cultural y comunicativa de Andalucía, sino también por hacer visible a través de la investigación en comunicación el conjunto de las relaciones sociales y culturales que ha contribuido a forjar nuestra sociedad. Desde finales de la Edad Media, la presencia catalana en Andalucía es un hecho, producto de la repoblación del territorio de al-Ándalus conforme avanzaba la conquista cristiana. Esta presencia se afianzó en épocas posteriores merced a la actividad comercial e industrial de los empresarios catalanes, encontrándose muchos ejemplos de esta presencia y actividad económica catalana en muchos lugares de nuestra tierra. A modo de ejemplo, la participación del capital catalán fue significativo en la prensa andaluza del siglo XIX, en particular en periódicos tan importantes como La Unión Mercantil, diario fundado en Málaga en 1886, así como en el sector de la impresión en papel.
Por razones distintas, y relacionadas con la debilidad de la estructura económica andaluza durante el siglo XX, más de un millón de andaluces emigraron a Cataluña en los años 60, dando forma a la «novena provincia andaluza», y llevando consigo no sólo su mano de obra, sino también a sus familias, sus creencias y sus tradiciones, muchas de las cuales se han integrado perfectamente en la vida social y cultural catalana. Son «los otros catalanes» de los que habla Francisco Candel. Todos ellos han contribuido con su trabajo a construir la Cataluña de hoy. Así lo expresan Angelina Puig i Valls y Teresa de Ortega cuando escriben en Andalucía y Catalunya. Dictadura y emigración que los hombres y mujeres que llegaron de otros pueblos de España, principalmente de Andalucía, se convirtieron en parte consustancial de la construcción de la sociedad democrática catalana.
El sentido humano y vital de la cultura que tienen los andaluces, ese «aquél» tan suyo —en palabras del poeta José Chamorro—, es fruto de su propia historia como crisol de culturas. Se impone, pues, seguir explorando las influencias recíprocas de catalanes y andaluces, y de otras comunidades autónomas, para comprender mejor las redes culturales que se establecen en el interior de España y que orientan nuestro propio devenir, aunque las coyunturas políticas oculten a veces los procesos culturales que dan cohesión a los pueblos. Los estudios de comunicación son, en ese sentido, una pieza clave en la investigación de la cultura, porque ayudan a entender mejor los mecanismos de representación simbólica sobre los que se produce la construcción social de la realidad.
Juan Antonio García Galindo
Director del Instituto Andaluz de Investigación en Comunicación y Cultura